1. Reconocer y cambiar los pensamientos negativos e irracionales por otros pensamientos más racionales y adaptativos. Cuando tenemos ansiedad gran parte del tiempo nos rondan por la cabeza numerosos pensamientos ansiosos que no podemos controlar. Son pensamientos automáticos e intrusivos que, aunque tienen una base de realidad son en su mayor parte pensamientos irracionales. Estos pensamientos nos dejan abrumados y confusos y no podemos pensar con claridad.
Es importante trabajar estos pensamientos con la ayuda de un psicólogo para poder pensar de una forma menos catastrófica y liberarnos al fin de la ansiedad.

2. Aprender técnicas de Relajación. En la consulta del psicólogo puedes aprender técnicas de relajación para poder reducir la ansiedad. También es importante aprender distintas disciplinas como el yoga, el mindfulness, etc.
A través de la meditación, la respiración, la concentración y posturas específicas, estos métodos fortalecen tanto el cuerpo como la mente. Están aconsejado para todo tipo de individuos, independientemente de la edad, el sexo o la historia médica. Y a su práctica se asocian, por ejemplo, la disminución del estrés, el incremento de la capacidad de concentración, la tonificación de la masa muscular y el aumento de la resistencia física, entre otros beneficios.

3. No llevar una vida sedentaria. El ejercicio físico es un hábito muy recomendable para conseguir reducir la ansiedad y vivir de una forma más optimista y positiva Es importante encontrar un ejercicio adecuado para cada persona y ponerse metas realistas. El ejercicio debe convertirse en una rutina para poder luchar contra los procesos ansiosos y depresivos, sin embargo, no hay que desanimarse por los periodos de inactividad, tenemos que reanudar la actividad en cuanto nos sea posible.

4. Dormir es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema nervioso, además de que nos permite estar más alerta, más concentrados, tener un mejor rendimiento cognitivo y cometer menos fallos de memoria o atención. Se considera que una persona tiene una buena calidad del sueño cuando el tiempo que ha dormido le permite estar descansado a lo largo del día siguiente, su sueño no se ve interrumpido y es lo suficientemente profundo para resultar reparador.

5. Salir de la ciudad y buscar entornos naturales. Pasar tiempo en la naturaleza es una buena medida contra el estrés. Hay que aprender a escuchar, estar tranquilo, centrarse en el aquí y en el ahora, dejar que todos los sentidos sientan y disfrutar de lo que tenemos a nuestro alrededor.

6. Tener una alimentación sana. Cuando tenemos ansiedad muchas veces aparece el hambre emocional que es un tipo de ansiedad que nos hace comer normalmente de forma compulsiva alimentos con alto contenido en azúcar o en sal. Estos alimentos nos producen una satisfacción inmediata, un sentimiento de placer instantáneo que reduce psicológicamente la ansiedad, sin embargo, nos lleva a comer de forma impulsiva y descontrolada.  La solución es aprender a regular las emociones, para que a largo plazo no suponga una dificultad en nuestro día a día y no tengamos que recurrir a conductas que a corto plazo nos alivian pero que a largo plazo nos perjudican.

7. Realizar actividades que me motiven. Aumentar la estimulación haciendo actividades que nos motiven y nos ayuden a reducir la ansiedad. Pintura, jardinería, decoración, manualidades, mandalas, estar con los amigos, leer, ir al cine, escuchar música… Cada uno tiene que buscar la actividad que le llame la atención y que le sirva para reducir la ansiedad. Es mejor empezar por actividades que se pueden hacer en casa o solos y después ir abriéndose a apuntarse a una actividad que suponga una obligación semanal y que pueda ser compartida con más gente.

8. Medicación. En el tratamiento de la ansiedad se emplean habitualmente dos tipos de fármacos: los ansiolíticos y los antidepresivos. Se puede acudir al médico de cabecera o si se quiere tener un seguimiento más especializado se puede acudir al psiquiatra que además algunos tienen formación en psicoterapia y el tratamiento es más completo.